A sus 38 años Damián Álvarez se va como monarca de la Liga MX, después de haber levantado el trofeo de campeón vestido de tigre en el Estadio BBVA Bancomer.
Tenía más de 6 meses madurando la decisión, pero después de la ovación que le dieron más de 36 mil aficionados en el entrenamiento previo a la Final y de haber vencido a los Rayados se convenció que era el momento ideal para decir adiós.
“Es un momento inmejorable para terminar mi carrera, como decimos los tiempos de Dios son perfectos, el futbol también los tiene”, dijo ayer en un emotivo mensaje en el Estadio Universitario.