Agresiones verbales e incluso físicas llegan a recibir personal del Centro Antirrábico cuando acuden por un perro para su observación de 10 días, porque mordió a una persona.
Adán Reyes Guerrero, coordinador del programa Zoonosis de la Jurisdicción Sanitaria número Cuatro, expresó que en la mayoría de los casos que se atienden no pueden retirar al animal, porque los dueños se oponen evitando que se los lleven.
“Mucha gente cree, que es ir por el perro y ya, pero no es así, hay que batallar con el dueño porque no quiere dejar que nos traigamos al animal”, dijo.
Recomendó a las personas que presentan su queja en el antirrábico, acompañen al personal al domicilio en donde se encuentra el perro para que no tengan problemas con los dueños cuando vayan a levantarlo.
Exhortó a los que tienen canes que agredieron a que colaboren, dejando que se lo lleven a observación para descartar que no tenga ninguna enfermedad.