Recomiendan lavado de manos con agua y jabón después de ir al baño y antes de preparar alimentos, práctica que debe aplicarse en casa pero también en las guarderías para evitar males diarréicos.
“Las diarreas generalmente son de transmisión oral fecal, es decir nos contaminamos las manos cuando cambiamos pañal a los bebés, de ahí la importancia de mantener en todo momento el hábito de la limpieza”, dijo Gloria Leticia Doria Cobos, epidemióloga de la Jurisdicción Sanitaria IV.
Otra cosa importante también es “evitar consumir alimentos expuestos en la vía pública porque con las altas temperaturas pueden descomponerse fácilmente y provocar males gastrointestinales”, añadió.
Comentó que la incidencia de la enfermedad está dentro del canal endémico para esta temporada de verano y se mantiene por tanto en el nivel esperado.