De visita en el país, Susan Susan Coppedge, Embajadora del Departamento de Estado para el Monitoreo y Combate a la Trata de Personas, advirtió que el alza en la migración centroamericana indocumentada podría poner a más personas en riesgo de ser víctimas de este delito, conocido como una forma de esclavitud moderna.
“Sé que hay problemas de un alza en la migración en la frontera sur de México y siempre que hay migrantes indocumentados hay mayor riesgo de que se conviertan en víctimas de trata, eso sucede en cualquier lugar del mundo. Es un área en la que México se está enfocando y estamos tratando de entrenar gente, tanto aquí como en Europa, sobre la trata en las comunidades migrantes”, remarcó.
En el caso de la crisis de los niños migrantes de 2014, dijo que se logró detectar a un grupo de adolescentes guatemaltecos que cruzaron territorio mexicano y llegaron al estado de Indiana en Estados Unidos, donde eran explotados en campos agrícolas, sin paga y sin vivienda adecuada.
Mencionó que puesto que el delito de la trata se mantiene oculto, puede pasar mucho tiempo antes de que se descubran este tipo de situaciones, sobre todo porque no es fácil que la víctima escape y denuncie.
Coppedge, quien asumió el cargo en octubre de 2015 y antes se desempeñó como fiscal federal para casos de trata, aseveró que han detectado que muchas de las víctimas que llegan a los Estados Unidos poseen documentos fraudulentos tramitados en México.
Insistió en que la condición indocumentada de una persona la hace todavía más vulnerable.