No obstante que el algodón se ha convertido un cultivo muy redituable y que se plantea como la alternativa al maíz y sorgo que tantos sinsabores han traído a los agricultores, la falta de infraestructura frena el desarrollo de esta fibra en la región.
Fue el agrónomo José Luis Hinojosa Conde, quien explicó que el algodón ganó terreno tanto en México como en Estados Unidos, en donde “todos los que sembraban maíz, se fueron a sembrar algodón”, pero explicó que en la región norte de Tamaulipas, pese al optimismo, mientras no se cuenten con despepitadoras, no se podrá ampliar la superficie que se siembra con algodón.
Explicó que el interés por esta fibra no pasa del optimismo, pues en Río Bravo, solo existen dos plantas que procesan el algodón, separando fibra, semilla y basura, una en la carrera Matamoros-Mazatlán con brecha 121 y la otra se ubica al sur de la brecha 109.
Hay que señalar, que si bien ha ido creciendo la siembra de esta fibra, la pasar de 3 mil a 11 mil hectáreas en los últimos años, mientras no se cuente con mayor infraestructura, no se podrá acceder a todos los beneficios que implica la siembra de este cultivo.
SÓLO 2 PLANTAS
El interés por esta fibra no pasa del optimismo, pues en Río Bravo, sólo existen dos plantas que procesan el algodón, separando fibra, semilla y basura.