Buenos Aires, Argentina
Mauricio Macri ya tiene encima de la mesa su primer conflicto internacional importante y precisamente con un socio estratégico clave: China. La prefectura naval, la fuerza que controla las aguas argentinas, ha ametrallado hasta provocar el hundimiento de un pesquero chino que se había acercado demasiado a la costa argentina para buscar calamares. Hace unos días ya hubo disparos de aviso desde un barco de prefectura a otro pesquero chino que se acercó demasiado y entró en aguas argentinas en la Patagonia. Argentina está acostumbrada a ver barcos extranjeros, sobre todo asiáticos, en aguas internacionales cercanas a su costa, importantes caladeros, pero hasta ahora no había tenido ningún conflicto de este calibre.
Los agentes de Prefectura ametrallaron el barco hasta causarle daños que provocaron que se hundiera en alta mar, pero no hubo heridos. Todos los tripulantes pudieron escapar en botes salvavidas y el capitán quedó detenido.
Según un portavoz de Prefectura, el barco chino estaba dentro de las 200 millas argentinas y cuando se les dio la orden de apagar los motores, la embarcación inició la huida y comenzó una persecución. A los pocos minutos, según explicó a EL PAÍS la misma fuente oficial, el buque argentino logró acercarse al chino y el capitán de éste último inició la marcha atrás con el objetivo de provocar una colisión que “hubiese provocado una tragedia”.
En ese momento, la fuerza argentina efectuó un disparo intimidatorio pero el barco chino no hizo caso. Emprendió nuevamente la huida y ahí fue cuando el buque argentino disparó a la proa, provocando así el ingreso de agua a las cámaras del pesquero, que se escoró y comenzó a hundirse. Cuatro hombres se arrojaron al mar a bordo de una balsa, entre ellos, el capitán, quien fue detenido. El resto de la tripulación fue rescatada por otro pesquero chino que salió a mar abierto.
China es un socio estratégico de Argentina, el principal comprador de sus productos agrícolas, en especial la soja. El anterior Gobierno, con Cristina Fernández de Kirchner, había establecido una alianza muy fuerte con el Ejecutivo chino que Mauricio Macri cuestionó en su momento. Sin embargo, una vez llegado a la presidencia, Macri ha insistido en todo momento en que quiere tener la mejor relación posible con China porque los negocios que tiene este país en Argentina son demasiado importantes. Macri ha evitado en todo momento cualquier crítica al régimen chino, pero ahora no podrá evitar que se produzca un conflicto diplomático importante, que sería aún mayor si hubiese heridos.