Más malo que bueno fue el año que está por terminar para muchos micro industriales que operan en el municipio, pero tienen la esperanza de que el entrante sea mejor en todos los aspectos.
“En este que se va, hubo más desesperanzas que esperanzas, menos trabajo y ventas para quienes viven de prestar servicios o vender artículos diversos, porque los programas nacionales que se anunciaron con bombo y platillo no aterrizaron al final de cuentas en esta región del país”, dijo Jesús Rodríguez Torres, presidente de la Asociación de Micro industriales.
Las bajas de negocios, afectó a varios de ellos que prefirieron dedicarse a otra actividad o simplemente por incosteabilidad cerraron sus puertas.