Aunque no se debe bloquear las vialidades de la ciudad, comerciantes o dueños de negocios, principalmente en la zona centro, lo hacen todos los días, generando menos espacios para caminar.
Familias que acuden a realizar sus compras, tienen que caminar entre las angostas banquetas, pero además hacerlo entre estufas, refrigeradores, abanicos, bases para camas, y hasta colchones.
Pero además no pueden bajarse a la calle, ya que del otro lado también hay sillas, burros para planchar y hasta contenedores para el agua.
Si el ciudadano no quiere pasar en medio de todos los artículos para el hogar que exponen los comerciantes, deberá caminar en medio de la calle o por un lado entre los autos.
Incluso hay vendedores que colocan sus anuncios en la vía pública, invadiendo una parte del carril de los automovilistas.
Con lo anterior los peatones tienen cada vez más, menos espacios para poder caminar libremente sin riesgos, ya que las banquetas son angostas pero además tienen que hacerlo en medio de los negocios.