Vaduz, Liechtenstein

Ni una goleada 8-0 sobre Liechtenstein pudo meter a España a la Copa del Mundo, aunque la acercó mucho más.

El triunfo abultado como visitante le valió a La Roja mantenerse en primer lugar del Grupo G con 22 puntos y de acabar la Eliminatoria europea hoy tendría un lugar en Rusia 2018.

El festejo no pudo llegar dado que Italia también ganó su juego a Israel y se ubica en el segundo puesto con 19 unidades, en zona de Repechaje. Todavía quedan dos partidos (a disputarse en octubre) para definir el sector.

La visita al principado no era ni de peligro, el rival, una Selección semiprofesional que cometió errores tan infantiles que se puede catalogar de “suerte” el que haya recibido sólo ocho tantos.

El primer gol de los visitantes se dio al minuto 3 y fue obra de Sergio Ramos por medio de un cabezazo en un tiro libre.

Cada que los ibéricos atacaban se notaba la debilidad de Liechtenstein para jugar al futbol, carencia que lograron cubrir por lapsos con ganas, insuficientes para ponerse de tú a tú con un cuadro como el español.

Para el cuarto de hora, Álvaro Morata hizo el segundo tanto también por medio de la cabeza, aunque el atacante estuvo en fuera de lugar previo a la anotación.

El error arbitral sólo fue superado por el que cometió el portero Peter Jehle un minuto después, cuando al tratar de despejar un balón todo lo que hizo fue abanicarlo.

Ya sin dueño, la pelota fue perseguida por Morata, quien al tenerla en su poder se aprestó a darle un pase a Isco, quien sin problemas disparó a las redes.

David Silva consiguió el 4-0 al 39’ con un tiro libre y la cuenta siguió con dos tantos de Iago Aspas (51’ y 63’), uno más de Morata (54’) y un autogol de Maximilian Goeppel (89’).

Con esto, La Roja logró su mayor victoria en calidad de visitante, ya que el récord pasado era de 6-0 propinado a San Marino (1999 y 2005) y Azerbaiyán (2009).