Las banquetas de la ciudad están siendo bloqueadas por los propios ciudadanos, empresas y negocios, una clara muestra es lo que pasa en la calle Rosalinda Guerrero y avenida Del Maestro.
Los peatones ya no pueden caminar libremente, ya que en el caso de un negocio de pollo ubicado entre la calle Occidental y Rosalinda Guerrero, que instaló toda una casa de madera que tapa completamente, solamente que el ciudadano prefiera pasar entre el asador y la hielera donde guardan el alimento.
Más adelante, entre la calle Río Mante y Rosalinda Guerrero, hay un taller automotriz, que aunque tiene adentro sus instalaciones también ocupa la banqueta, colocando sus vehículos ya sea para pintarlos o repararlos, mientras que los ciudadanos tienen que esquivar para seguir su camino.
Las propias familias han reducido las banquetas, afectando a los peatones, por ejemplo, algunas casas convirtieron la banqueta en parte de la subida de la cochera, en otras colocaron maceteros, haciendo más pequeño el paso para los ciudadanos.
A lo largo de la avenida, se pueden ver que vehículos también ocupan espacios que son dedicados a los peatones.
Los mismo pasa hasta con boleros, que han colocado sus sillas para asear calzado, pero obstruyendo la banqueta a los demás.
Otros negocios han optado por hacer de la banqueta, lugar donde colocar plantas, dejando al peatón, sin un lugar seguro por donde caminar, mientras que dueños de casas suben su auto a la banqueta, con el objetivo de que no sufran algún desperfecto, pero afectando a los mismos ciudadanos.