¿Capricho de la naturaleza?

El misterio de los niños con cabello rubio de las islas Salomón.

Estamos en Melanesia, en las paradisíacas islas Salomón. Quienes han viajado hasta aquí, se han sorprendido al ver a algunos de sus indígenas. Sus pieles oscuras contrastan con esos cabellos de los más variados tonos de rubio, desde el más platino hasta ese matiz que se acerca casi al pelirrojo.

En los niños es más llamativa esta característica, a medida que crecen, el cabello se oscurece ligeramente, quedando eso sí, matices muy claros que siguen llamando mucho la atención. Es decir, tenemos a nativos del Pacífico sur con la pigmentación en su piel típica de los países africanos, mientras que el cabello muestra esa cercanía prototípica de los países escandinavos.

Todos estos rasgos son claramente hereditarios, y a su vez, tiene que ver también a la población de la cual formemos parte. Según nos explican los científicos, aquellos países más cercanos al ecuador disponen de un tono de piel y cabello más oscuro, que el de aquellas personas que son nativas de países más fríos, norteños y por supuesto, escandinavos. 

Ahora bien, pero ¿qué ocurre con la gente de las islas Solomón del este de Papúa Guinea?

En un estudio llevado a cabo por el Centro de Análisis Causal en Epidemiología Traslacional, de la Universidad de Bristol, en el Reino Unido, y la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, concluyeron en los siguientes aspectos:

• En las islas Salomón sólo el 10% de la población muestra este rasgo. 

Es decir, el 10% de las personas presentan cabellos de un rubio muy claro, no es pues el 100% de la población tal y como suele mantener la leyenda popular. No obstante, esa misma proporción es la que podemos ver en Irlanda, por ejemplo.

• Los nativos mantienen el “mito” de que nacer con los cabellos rubios se debe a la continua exposición al sol y a comer mucho pescado. 

• Los investigadores quedaron asombrados al descubrir que en las Islas Salomón existe un gen independiente conocido ahora como TYRP1, que codifica una proteína relacionada con tirosinasa, la cual, hace que el cabello presente una pigmentación y una tonalidad rubia.

• Este gen es exclusivo de las Islas Salomón y no está en el genoma de los europeos.

• La característica del pelo rubio en la población de estas islas se formó de modo único en esta región, de ahí que médicos y genetistas se muestren tan interesados en estas informaciones.

Así pues, no se debe a ningún experimento genético, ni a un antepasado europeo que originó este rasgo tan singular en los indígenas de estas islas en la región ecuatorial de Oceanía. Es simplemente un gen, un acto voluntario de la naturaleza humana, y cuya razón o finalidad, es todo un reto a descubrir por parte de la ciencia.