Entre 20 y 25 microbuses por mes son retirados de la circulación por espacio de cinco días tras descubrirse que presentan algunas irregularidades como vidrios rotos, pisos agujerados, asientos en mal estado y ‘cortinas’ de papel ahumado y tipo espejo que les impide tener buena visibilidad a los choferes.
“Todo esto va enfocado a que los concesionarios ofrezcan un mejor servicio y más seguridad y comodidad a los pasajeros”, dijo Eduardo Luján Bustos, delegado regional de Transporte Público.
Cuando un supervisor que recorre distintas rutas de las que operan en Reynosa detecta un ‘micro’ con excesivo papel en el vidrio delantero, inmediatamente se le exhorta al conductor que lo retire so pena de aplicarles la multa que señala el reglamento.
Muchos son los que personalmente proceden a despegarlos atendiendo el llamado que se les hace como forma de prevenir un accidente.
“Hay algunos casos en que son tantos los pegotes que llevan los microbuses que apenas se les ven los ojos a los conductores y lógicamente que esto les impide ver bien sobre todo por las noches”, añadió Luján Bustos.
Cuando se trata de anomalías en el piso de las unidades, tienen cinco días para corregirlas.
Invitó el funcionario a la población usuaria a denunciar malos tratos a manos de choferes por lo que pueden comunicarse al teléfono 925-10-83 o acudir personalmente a las oficinas situadas en el edificio de dependencias estatales en horario y días de trabajo.
En Reynosa se cuenta con 3,600 vehículos operando desde microbuses, transporte de personal, escolares y taxis.