Ayer se celebró el Día del Abuelo, festejo que se lleva a cabo oficialmente desde el año de 1983 aunque el origen de esta celebración se remonta desde la presidencia de Lázaro Cárdenas, quien propuso que hubiera una fecha para honrar a los abuelos.
Lo lamentable es que en México 8 de cada 10 abuelos viven en pobreza y abandono, muchas veces a estos los dejan terminar sus vidas pidiendo limosna en la calle o bien en un asilo en donde nunca los van a visitar.
Cada año aumentan los índices de personas de la tercera edad, es decir que para el año del 2050, habrá más adultos mayores que jóvenes, según estadísticas del Consejo Nacional de Población (Conapo).
Es alarmante también el trato indigno del que son objeto los abuelos, según el Instituto Nacional de las Personas Adultas (INAPAM) 3 de cada 5 adultos mayores sufren violencia familiar, por otra parte también sufren algún grado de abandono y maltrato como golpes, ataques psicológicos, insultos y hasta robo de sus bienes por parte de familia cercana.
Los abuelos son una parte fundamental del pilar de un hogar, son las personas sabias y consentidoras, es por eso que se merecen todos los cuidados del mundo y una vida digna. Muchos de estos abuelos aún tienen que trabajar para sobrevivir, teniendo familiares, hijos, nietos, que pueden velar por la integridad física de ellos, pero no les importa, tristemente la mayoría de los mexicanos ven a los ancianos como una carga y los dejan a su suerte.
Lo interesante aquí es que a los jóvenes se les olvida que algún día llegarán a ser adultos mayores y serán parte, quizá, de estas estadísticas.