Un hombre salía de un banco en el centro comercial Espacio de Interlomas -un exclusivo municipio del Estado de México, colindante al oeste con el DF- cuando dos individuos se le acercaron por la espalda y le tomaron del brazo para llevarlo a la fuerza hacia el parking.
Entonces, empezó el tiroteo por los pasillos del centro comercial entre los asaltantes y los guardaespaldas del hombre que había salido del banco. Las balas rompieron los cristales de una cafetería y los secuestradores cayeron abatidos al suelo.
Uno falleció de un balazo en el pecho y el otro quedó herido. Los dos asaltantes eran policías de la fiscalía del Distrito Federal.
Juan Roldán Suárez, de 43 años, falleció en el acto y Hugo Cruz, de 56, fue detenido por las autoridades. Ambos pertenecen a la Policía de Investigación de Ciudad de México, un cuerpo dependiente de la fiscalía. En el momento del asalto, llevaban encima su placa de identificación, unas esposas y las armas reglamentarias: dos pistolas escuadra de nueve milímetros con la leyenda Policía Judicial del Distrito Federal inscrita en la culata.
El hombre víctima del conato de secuestro quedó ileso y, según la versión de los testigos recogida por la prensa mexicana, fue custodiado por sus guardaespaldas hasta una camioneta.