Monterrey, NL
Angélica María y Enrique Guzmán saben que ya no viven en los 60, pero esto no les impidió ganarse al público con las mismas técnicas que utilizaban en aquellos años: con temas de amor y uno que otro pasito de baile.
Los ex enamorados cerraron la madrugada de ayer La Caravana del Rock en la Arena Monterrey ante 11 mil 500 personas (cifra oficial) que los ovacionaron de pie.
Angélica María demostró que aún es la inigualable “Novia de México” y, ataviada con un vestido rojo, ofreció 40 minutos de música en los que no dudó en burlarse de su edad.
“Este vestido lo usé cuando tenía 17, ya se imaginarán, ha pasado un tormentón”, expresó la cantante.
La leyenda de la música deleitó con “Vivaracho”, “Paso a Pasito”, “Johnny El Enojón”, “El Día”, “Un Peso”, “Un Beso Pequeñísimo” y “¿A Dónde Va Nuestro Amor?”.
Angélica María dejó el micrófono a Guzmán, y el intérprete no perdió el tiempo. Inició con “Mi Corazón Canta” y “Con Y por Amor”.
El referente del rock and roll también interpretó la famosa “Tu Cabeza en Mi Hombro” y cerró este viaje en el tiempo al cantar “Ámame” junto a Angélica María.
Palito Ortega y César Costa, quienes habían cantado más temprano, salieron de nuevo al escenario para acompañar a la pareja en “Dame Felicidad”.
La euforia del público se expresó mediante el baile espontáneo en los asientos, pero las máximas señales de aprobación fueron las tres ovaciones de pie que regalaron a los conmovidos Costa, Guzmán y Angélica María.
Ellos, junto con el resto de La Caravana del Rock, volverán a la Ciudad el 20 de enero con los temas famosos e historias sobre los 60.