Copiosas lluvias producto del sistema frontal número 1, provocaron caos en sectores bajos de la ciudad y en colonias y fraccionamientos en donde la basura que los mismos ciudadanos desechan, taponeó coladeras y desagües.
Desde las 16:00 horas del lunes y hasta bien entrada la madrugada del martes, efectivos de Protección Civil, encabezados por su titular, Axel Góngora de Isla, recorrieron los sectores más anegables, como colonias Morelos, Hijos de Ejidatarios, ampliación Benito Juárez, así como fraccionamientos Las Torres entre otros, en donde ubicaron los puntos, donde los cauces naturales del agua y desagües, se encontraban saturados de basura y cacharros, destacando incluso, un tanque de gasolina automotriz que obstruía uno de los cauces.
Manualmente se destaparon infinidad de taponamientos y se retiraron cacharros del cauce de las aguas pluviales, para que las colonias y asentamientos inundados, tuvieran un respiro.
Igualmente las tuberías de desagüe que conducen la lluvia al dren Río Bravo, también fueron despejadas para un mejor desalojo del agua.
Protección Civil recordó los números de emergencia para reportar todo lo relacionado con afectaciones por el frente número 1, el 911 o directamente al 934-70-00.
DEJAN AGUACEROS LODAZALES EN VILLA
Sólo bastaron algunas lluvias para que arterias ubicadas en colonias de la comunidad como la Jardín, Francisco I. Madero, Mezquital, Benito Candanoza y otras más en Nuevo Progreso, se transformaran en verdaderos patinaderos debido al agua que se estanca y da origen a que se formen charcos de lodo, y resulte difícil transitarlas.
Una de las más vistas en donde se recrudece este problema que afecta a un sinnúmero de estudiantes, trabajadores y conductores que a diario hacen uso de las calles y banquetas son las colonias Jardín de las más populosas y Francisco I. Madero.
En las entradas y diversas calles se puede ver claramente como es de que el agua al quedar estancada se vuelve espesa y al mezclares con la tierra se forma como una especie de lodo pegajoso que de paso se adhiere a los neumáticos, y no se diga cuando el peatón llega a cruzar las cosas se ponen peores ya que hay ocasiones en que se pega hasta en los zapatos. (Por Armando González / Nuevo Progreso, Tam.)