El juego de nunca acabar

Mi aventura inició en un planeta misterioso

¿Cómo reseñas un juego que tienes 18 quintillones de planetas a explorar? Pregunto porque llevo una semana jugando No Man’s Sky y aún no sé si es suficiente tiempo como para juzgarlo. 

Y es que, mientras que la mayoría de los juegos nuevos me recuerdan a otros títulos similares y puedo hacer comparaciones, No Man’s Sky me colocó en un terreno desconocido, literal y figurativamente, donde todo lo que me rodeaba era nuevo, extraño e impredecible.

Mi aventura inició en un planeta misterioso. Mi nave estaba descompuesta y tenía que repararla con ayuda de ciertos elementos químicos que quién sabe de dónde iba a sacar. Temerosa, empecé a caminar y descubrí que mi traje tenía un mecanismo que me mantenía con vida y otro que me protegía del frío, y conforme caminaba ambos se iban deteriorando: oh oh.

Noté que cargaba con una pistola láser e inmediatamente le disparé a las plantas, a las rocas y descubrí que así obtendría los materiales necesarios para despegar. Cuando ya no pude disparar más (¡se agotó la energía de mi arma!), empecé a golpear los objetos como cavernícola, abrí cajas ocultas entre los restos de otras naves y activé unos postes que salvaban el juego.

Todo iba bien hasta que la temperatura del lugar bajó a -53°C y mi personaje empezó a respirar con dificultad. La protección contra el frío estaba a punto de agotarse y, cuando busqué la nave, noté que estaba a 7 minutos de distancia, que son tal cual 7 minutos de juego. ¡Ah, como caminas en este FPS de supervivencia!

Entré en pánico: mi salud empeoraba rápidamente y de la nada mi casco se abrió. Como si fuera Buzz Light Year, pensé que me iba asfixiar: “¡Ya valió!”, grité frustrada por haber muerto en las primeras dos horas de juego pero, no, aún estaba de pie. Cuando finalmente regresé a la nave, me recuperé del frío y leí la descripción de cada herramienta: así descubrí que podía recargar mi arma y mi traje con carbono y otras materias.

El resto de mi travesía, que duró más de un par de horas, fue un constante “ensayo y error”: aprendí a usar mi propulsor correctamente sin caer estrepitosamente, encontré minerales raros, choqué con un grupo de camaleones que caminaban en dos patas (y que traté de alimentar), y me topé con una estructura espacial donde un marciano me vendió planos para crear nuevas herramientas.

Tras mucho tiempo de exploración, cuando ya podía moverme en el terreno con tranquilidad, logré despegar la nave. Vi claramente cómo me alejaba del suelo y entraba al espacio: no hubo pantallas en blanco ni tiempo de espera, me seguí moviendo entre las estrellas hasta que entré a un nuevo planeta y estacioné la nave. Cuando me bajé, mi traje ya no me protegía del frío sino contra la radiación y un robot volador me disparó. ¿No podemos ser amigos?

Esa es la belleza de No Man’s Sky: hay millones de posibilidades y sorpresas esperando a ser descubiertas. No hay humanos que te ayuden, ni guías extensas, sólo tu curiosidad y habilidad para aprender sobre la marcha, así como algunos recordatorios de lo que tienes que hacer.

Y, aunque a ratos me sentí muy sola jugando y creo que eventualmente podría cansarme de explorar (no ha ocurrido hasta ahora), agradezco este lanzamiento que ofrece algo completamente nuevo, tecnología fascinante y un vistazo al que podría ser el inicio de una nueva generación de videojuegos. 

No Man’s Sky $1,300 para PS4



SABÍAS QUÉ:

1. El prototipo de No Mans Sky tomó 4 años en ser desarrollado.

2. Los planetas y sistemas solares del título se generan automáticamente por medio de algoritmos.

3. La flora y fauna de cada planeta dependen de su posición en un sistema solar.

4. El arte del juego fue creado modularmente: el título toma fragmentos de los distintos animales, plantas y objetos, y los mezcla para crear nuevas especies.

5. La fauna del juego está inspirada en cientos de animales reales con algunos toques de fantasía.

6. Conforme los usuarios se acercan más al centro del universo, más extraños son los planetas.

7. Las naves y la tecnología están inspiradas en la ciencia ficción de los 60´s.

8. Aunque el juego no tiene una historia en particular, sí tiene razas alienígenas que han construido bases y tienen su propia cultura.