El Santo Cerro, también conocido como el Santuario a la Virgen de las Mercedes, es uno de los atractivos turísticos más visitados de la provincia La Vega de la República Dominicana. Está ubicado al noreste de Concepción de La Vega a pocos kilómetros de la Autopista Duarte.
Esta iglesia de color blanco-beige y techo de tejas rojas fue construido en la cima de una colina donde Cristóbal Colón plantó debajo de un árbol una cruz de madera que fue un regalo de la reina Isabel la Católica. Según la leyenda en 1495 durante una batalla entre los nativos indígenas y los colonizadores españoles apareció la Virgen de las Mercedes, espantado a los guerreros taínos.
Antes de su fallecimiento, Colón le dijo a su hijo Diego que levantara en este cerro una iglesia en honor a la Virgen, pero no la construyó.
Fue en el año 1527 que se estableció en el cerro el primer convento de la Orden de la Merced.
El templo católico que existe hoy fue construido en el año 1880 por Onofre de Lora, y es cuidado por las Hermanas Mercedarias de la Caridad.
Aunque la cruz ha desaparecido, el Santo Hoyo está dentro de la iglesia, cubierta con una parrilla de alambre y preservado por las monjas y sacerdotes.
Además del santuario, el Santo Cerro cuenta con un museo y un mirador que ofrece majestuosas vistas panorámicas del Valle del Cibao. Fue de ahí que Cristóbal Colón exclamó: “Es la tierra más hermosa que ojos humanos jamás hayan visto”.
Cada 24 de septiembre, miles de creyentes visitan este lugar sagrado para venerar a la Virgen de las Mercedes, la patrona de la República Dominicana.