Miguel Alemán, Tam..
Madre e hija, además de un empleado del SAT resultaron lesionados durante un aparatoso accidente automovilístico registrado en plena zona centro de esta ciudad, por lo que fueron atendidos por personal de Protección Civil, quienes los trasladaron en ambulancias a diferentes clínicas particulares.
El percance vial se registró siendo alrededor de las 10:00 horas de este domingo en el cruce de la avenida Francisco I. Madero y calle Sexta de la zona centro, donde quedaron esparcidos una gran cantidad de vestigios de las unidades participantes en el aparatoso accidente.
De acuerdo la versión de algunos testigos, un vehículo sedán, marca Volkswagen, tipo Jetta, gris plata, de reciente modelo y con placas mexicanas, se desplazaba en vía libre sobre la avenida Francisco I. Madero, cuando de pronto se le atravesó un automóvil marca Nissan, tipo Altima, gris oscuro y de reciente modelo que circulaba por la calle Sexta, donde también derribaron varios árboles pequeños de una residencia.
Extraoficialmente trascendió que el auto responsable Nissan Altima, era tripulado por un presunto funcionario del Sistema de Administración Tributaria (SAT), quien andaba bajo los efectos de bebidas embriagantes y al ver la magnitud de los hechos, optó por emprender su inmediata huida para evadir la acción de la justicia.
Sin embargo y a bordo del auto abandonó a su suerte a su acompañante de parranda identificado como Enrique Terrón de 35 años de edad, quien es empleado Fiscal de la Aduana Local y resultó seriamente lesionado con golpes y heridas cortantes en la frente, quedando completamente inconsciente por espacio de varios minutos debido a su estado inconveniente.
En el otro vehículo tipo Jetta, viajaban una mujer de 52 y su hija de 27 años, ambas con residencia en el fraccionamiento Villa del Mar, quienes resultaron lesionadas, por lo que tuvieron que ser trasladadas para que recibieran la debida atención médica en una clínica particular.
Por su parte, las autoridades de vialidad realizaban el peritaje correspondiente, lográndose establecer que los daños materiales ocasionados en ambas unidades podrían superar los 200 mil pesos, los cuales tendrá que cubrir el empleado federal de la Aduana Local que resultó responsable y que se dio a la fuga.
Cabe mencionar que esta no es la primera ocasión, en que empleados federales de la Aduana Local, resultan como responsables de accidentes viales por andar en completo estado de ebriedad, lo cual debería de ser enérgicamente sancionado por altos funcionarios de la SHCP.
Por último, fuentes consultadas posterior al accidente, coincidieron en que los escasos agentes viales que se quedaron a laborar, son muy pocos para poder cumplir con la demanda de vigilar las zonas escolares, así como calles y avenidas, además de atender los accidentes que se puedan registrar en la ciudad.