El hombre que encontraron muerto con un tiro de gracia en la brecha que conduce al Ejido Las Anacuas, resultó ser un joven riobravense que desde el pasado 16 de diciembre había sido reportado como desaparecido.

La madre de Jesús N., de 23 años, desde el día que su hijo ya no llegó a su domicilio y luego de haberlo reportado como desaparecido, no descansó en la búsqueda, hasta que ayer, al acudir al SEMEFO lo encontró.

El cuerpo de su hijo había sido localizado entre unos matorrales a unos 400 metros al sur del Viaducto Reynosa y algunos 30 metros al oriente del camino de terracería que lleva al ejido Las Anacuas.

Ahí observó fotografías y las ropas que vestía el hombre que encontraron tirado entre basura y hierba e inmediatamente lo reconocido, por lo que ayer realizó los trámites para la entrega del cuerpo ante la UGI-4 que fue la que tomó conocimiento del hallazgo.

Con la identificación del joven, los policías tendrán material para abrir las líneas de investigación en un intento por aclarar el crimen.

En el lugar de los hechos donde se presentaron elementos de la SEMAR, Militares, Policías Estatales, Policías Investigadores y personal de Servicios Periciales, quienes levantaron evidencias que ahora podrían servir para la indagatoria.