Un joven estudiante preparatoriano fue encontrado muerto en el patio frontal de su domicilio, poco antes del amanecer. Fue su progenitora, quien al regresar de su trabajo poco antes de las 6:00 horas, quien descubrió el cuerpo sin vida de Francisco Enrique Elizalde Ríos, de 18 años.
El cuerpo de Elizalde se encontraba tirado entre unos maceteros que se ubican al frente del domicilio situado en calle Nogales de la colonia Praderas de Alcalá.
El fiscal segundo investigador, Miguel Ángel Ríos Sanjuan y elementos de la Policía Ministerial del Estado, con peritos de la Procuraduría se constituyeron en el escenario de los hechos, donde dieron fe del cuerpo del joven estudiante.
Al llevar a cabo una inspección ocular en torno al escenario observaron que una maceta se había caído de su base que era un block. En el block se encontró una huella que evidenciaba un golpe con algo, por lo que las autoridades supusieron que Francisco Enrique, hubiera salido de su domicilio en los momentos de la lluvia para tratar de quitar la ropa que colgaba de un tendedero.
Dedujeron que pudo haber sufrido un resbalón y en la caída se haya golpeado en la nuca contra el block, donde se encontraba la maceta. No obstante lo anterior el fiscal ordenó a elementos de la Policía Ministerial una investigación a fondo, amén de que esperarían el resultado de la autopsia legal para confirmar el posible golpe en la nuca y la muerte por desnucamiento.
La progenitora del joven preparatoriano dijo haber salido la noche anterior a eso de las 20:00 horas a su trabajo y al concluir su turno poco antes de las 6:00 horas, regresó, como es costumbre a su domicilio, encontrándose con el cuadro aterrador. Se sorprendió al ver el cuerpo de su hijo tirado al frente del domicilio y pidió auxilio, pero ya no había nada que hacer, pues no había hálitos de vida.
Después dieron aviso a las autoridades y éstas se encargaron de constatar que no había huellas que evidenciaran la presencia de algún extraño o la posibilidad de un homicidio violento.
Dan como un hecho, un resbalón mortal. El cuerpo ya presentaba la rigidez cadavérica que hace pensar que su muerte pudo haberse registrado entre 4 y 5 horas antes del hallazgo.