Inesperadamente se abrió un socavón a unos pasos del cuartel de Protección Civil y Bomberos y del Hospital General de Reynosa, situación que generó un caos vial pues cuadrillas y maquinaria pesada ya empezó a trabajar en la búsqueda de una solución al problema.
La mañana de ayer elementos de una compañía constructora, no de COMAPA (Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado) procedió a roturar la carpeta asfáltica percatándose que en el sitio ya había desaparecido la red de drenaje, misma que ya estaba inactiva.
Un supervisor que únicamente se identificó como Pedro dijo que si en el fondo de la zanja que tuvo que abrirse se observa agua porque es producto del nivel friático que existe en el área, pero que no fue porque haya aflorado de alguna tubería.
Inicialmente se pensó que el problema era derivado de la tubería nueva que acaban de instalar, pero confirmaron que no fue así.
Sin embargo quienes participan en la ejecución de la obra desconocían cuándo terminarían los trabajos con los que se perjudicó a automovilistas que transitan por la calle Américo Villarreal con avenida Portes Gil.
Hasta ayer por la tarde la zanja ya alcanzaba más de 11 metros lineales y tres de profundidad y seguían viendo la manera de darle terminación a los trabajos pero ignoraban para cuándo podrían lograrlo.