Los familiares del joven que se encontró muerto y flotando en las aguas del canal Anzaldúas aparecieron ayer y tras justificar con documentos oficiales el parentesco cercano lograron que las autoridades les entregaran su cuerpo para darle cristiana sepultura.
El joven se llamó en vida Antonio Alfredo Vázquez, quien fue reconocido por sus familiares al difundirse algunas señas particulares. Con la identidad de la persona, elementos de la Policía Investigadora, adscritos a la UGI-2 podrán trazar diversas líneas en un intento por aclarar el homicidio.
Como se informó en ediciones anteriores el joven que conforme la autopsia murió de asfixia por inmersión, también presentaba heridas punzocortantes en diferentes partes del cuerpo.
Antonio Alfredo, a decir de su progenitora, era un joven tranquilo, incluso un tanto tímido, empleado de una maquiladora.
Tenía poco menos de un mes de haberse salido de una maquiladora, para buscar colocación en otra, buscando mejorar económicamente.
Trascendió que desde el pasado sábado había salido, pero ya no regresó. Se les hizo raro, pero no perdían las esperanzas de que volviera a su hogar, donde vivía solamente con su madre.
ALARMA PRESENCIA DE FLOTADOR DE SANITARIO QUE CREÍAN GRANADA
Autoridades policíacas se movilizaron tras la denuncia de habitantes de la calle 16 en Vista Hermosa, que aseguraban haber visto una granada entre las casas marcadas con los número 502 ó 505.
La movilización se llevó a cabo poco después de las 14:00 horas, pero minutos más tarde se dejó correr la versión en el sentido de que, lo que parecía una granada, era solamente un inofensivo flotador de un sanitario.
El flotador era de color negro y daba la apariencia de una granada, por lo que algunos habitantes del sector se escandalizaron y dieron el aviso a las autoridades.
Al lugar acudieron elementos de la Policía Ministerial, quienes al darse cuenta del flotador, se retiraron del lugar.