CIUDAD DE MÉXICO
Algunos niños que padecen deformaciones en la columna debido a una enfermedad llamada escoliosis pueden desarrollar otras complicaciones de salud si no reciben tratamiento, aseguró Michael Vitale, jefe del Departamento de Cirugía del Hospital Presbiteriano de Nueva York.
Los menores que tienen una curvatura en la columna de hasta 50 grados, detalló, no tienen riesgo de otros problemas médicos, pero, si se supera ese rango, la escoliosis puede afectar el corazón y los pulmones, y causar daños severos en los niños.
Por eso es importante detectar esta condición de manera temprana, sostuvo el especialista en entrevista, tras participar en el Cuarto Simposio Anual de Deformidades de Columna de Global Spine Outreach, que se realizó en México.
“Necesitamos ser muy cuidadosos a la hora de examinar a un pequeño. Si se nota alguna asimetría en la columna, necesita evaluación médica y una placa de rayos X”, señaló.
Vitale explicó que el 50 por ciento de los pacientes con escoliosis tiene antecedentes genéticos, otros presentan problemas neurológicos, síndromes o nacieron con deformaciones, pero la causa más común es la idiopática.
“Eso quiere decir que no conocemos la causa, pero ocurre durante un periodo de crecimiento rápido, por lo general en la adolescencia. Estamos tratando de entender la verdadera causa de la escoliosis y las implicaciones genéticas de esta enfermedad”, dijo.
Aunque la escoliosis puede manifestarse a cualquier edad, mencionó, se presenta con mayor frecuencia en adolescentes y en niños de entre 3 y 10 años de edad.
Las curvaturas de una columna deformada suelen tener forma de “S” o “C”, detalló el médico, quien trabaja en el Centro de Escoliosis más grande de Nueva York.
En esa área médica, ubicada en el Hospital Presbiteriano, Vitale y el doctor Lawrence Lenke tratan alrededor de 2 mil niños cada año.
Para atender la escoliosis, expuso el cirujano, existen diversos tratamientos, que se aplican según la edad, el tipo y el tamaño de la curvatura.
Indicó que en su hospital usan una técnica que consiste en colocar un corsé para enderezar la columna y así resolver la curvatura.
En niños de entre 5 y 10 años, agregó, colocan yesos o barras externas que se alargan durante el crecimiento, y en algunos casos, recurren a la cirugía.
“Hemos (logrado) en los últimos años la capacidad de detener la evolución de la escoliosis tratándola quirúrgicamente cuando se puede”.
Destacó que esta intervención quirúrgica dura, en promedio, dos horas y el menor se recupera en tres semanas.
“Pierden ese periodo en la escuela, pero pueden reanudar actividad física a los 6 meses. No es algo que asuste, la mayoría de los niños tiene buenos resultados”, apuntó.
CONÓZCALO
NOMBRE: DR. MICHAEL G. VITALE
Especialidad: Ortopedista pediátrico
Experiencia: Especializado en tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos para escoliosis pediátrica y otros problemas de columna. Realiza cerca de 200 procedimientos cada año; la mitad de ellos en niños menores de 8 años.
Reconocimientos: Ha recibido por cinco años consecutivos el premio Castle Connolly Top Doctors y ha sido nombrado entre los 50 médicos en Estados Unidos en el área de escoliosis por Becker’s Spine Review.