¿Modular?

Sí, se trata de un equipo al que puedes añadirle dispositivos externos, como cámaras o proyectores, que se acoplan al teléfono a través de poderosos imanes para robustecer sus funciones.

El Moto Z es igualito a ese viejo refrán de “Al cliente lo que pida” y también es un conquistador en serie, pues satisface los caprichos más exigentes.

¿Deseas que la batería dure más de 12 horas? ¡Concedido! ¿Sus 13 MP no te son suficientes y quieres que tome fotos como un profesional? ¡Hecho! ¿Quieres que sus bocinas sean suficientes para amenizar tu pequeña reunión? ¡Listo! Lo mejor de todo es que en la compra del teléfono se incluyen tres de los cinco módulos disponibles.

Cámara Hasselblad 4416

Es una cámara con un poderoso zoom 10 X y un flash de luz xenón que permite obtener imágenes más claras.

Usarlo es tan simple como emparejar la cámara (cuyo grosor es similar al de una pluma) con el teléfono. De inmediato, los imanes hacen su parte y la Hasselblad se fija fuertemente al teléfono.

Su zoom y obturador físico te hacen olvidar que se trata de un smartphone e incluso puedes tomar las fotos oprimiendo el botón de la cámara y no el smartphone, aunque eso sí, en la pantalla del teléfono puedes configurar la exposición, brillo y filtros. Además, ¡no necesitas cargarla! Se alimenta de la batería del smartphone.

Bocina JBL Soundboost

Esta bocina sirve para amenizar una pequeña reunión sin necesidad de recurrir a una batería extra o un sistema de sonido. También funciona mediante imanes y es muy fácil de usar: una vez que esté enganchada a través de los imanes, abre cualquier app y la bocina reconocerá la música de forma inmediata. Ojo, ésta sí necesita cargarse previamente, pero aguanta hasta 10 horas de reproducción.

Batería externa Incipio

Se coloca fácilmente sin necesidad de usar la entrada del cargador como el resto de las carcasas con batería integrada y otorga hasta 20 horas extra de poder.

Otra vez, lo único que debes hacer es emparejar el teléfono con la batería y dejar que los imanes trabajen.

Precio: 16,000 pesos.

EL PODER DE UNA PLUMA

La forma en la escribes es un método identificación aún más confiable que tu huella digital. La velocidad, presión e inclinación con la que trazas cada letra son factores que fabricantes como Wacom pueden detectar a través de plumas digitales y tabletas de dibujo.

“Los sensores de nuestras plumas miden distintas características del trazo, por eso una firma electrónica no se puede falsificar. Una huella también es segura, pero el usuario tiene que estar en el lugar mientras que la información de la firma puede ser almacenada y se puede recurrir a ella desde cualquier ubicación”, explicó Jens Kellersmann, director senior de relaciones públicas de producto para Wacom.

Por esta razón, la fabricante ha llevado sus productos a ramos que van más allá de las industrias creativas, como finanzas, salud y turismo. Incluso, con la configuración correcta, una pluma digital puede ser, en sí misma, una llave para identificar quién tiene acceso a un documento, quién realizó modificaciones o quién participa en un proyecto colaborativo dentro de una empresa.

“Cada pluma tiene un ID y, si quisieras, podemos hacerlo visible. Con esto, al compartir un documento en la nube queda registrado qué pluma se usó para editar o trabajar en el proyecto y así saber quién lo hizo y en qué horario, puedes dividir responsabilidades o estar al tanto de quién participó en la plataforma colaborativa”, aseguró Kellersmann.

Los stylus no son el único instrumento en el que Wacom trabaja para facilitar la escritura y el dibujo digital. Sus tabletas son el resultado de años de investigación para conseguir que las pantallas, que cuentan con un baño de ácido, ofrezcan la misma resistencia que el papel.

“Sabemos que la gente que quiere trabajar digitalmente necesita la pluma y la superficie correcta. La pantalla de nuestras herramientas más elaboradas no es

tan brillante como una tableta con retina porque se necesita el ácido para la resistencia, pero para quienes se dedican a esto todo el día, esto exactamente lo que buscan: se siente familiar”, destacó Kellersmann.