Primero lo hacía en bicicleta, con ingenio acomodaba sus productos. Luego se compró un triciclo el cual le ayudó a seguir con las ventas; ahora maneja una motocicleta y recorre toda la Ciudad.
Rosa Linda Herrera Paz, de 51 años, habitante de la colonia Módulo 2000 Rancho Grande, todos los días hace un recorrido por diferentes colonias de Reynosa, ofreciendo sus productos desde raspas de todos los sabores, chamoyadas, frituras y golosinas, todo lo ha acomodado en una motocicleta la cual parece una casa rodante.
Cuando tenia bicicleta solamente podía vender bollos y mangonadas, ahora con el paso de los años ha metido hasta fruta, así como choco bananas cuando es ciclo escolar y acude a una escuela, ahora con la moto ha colocado en la parte de atrás la hielera, a un lado ha colgado las frituras, y enfrente lleva el liquido para las raspas y las golosinas.
“Tengo 23 años haciendo esta actividad, me siento muy bien”, dijo.
Tiene hijos pero ya están casados, por lo que dedica su tiempo a su actividad de vendedora, los vecinos y los que la conocen siempre la apoyan.
“Empecé desde la bicicleta y ahora ando en la moto, vendo de todo, aprovecho el calor ara ofrecer mis productos”, expresó.
Cuando es vacaciones sale por la tarde, pero cuando hay clases sale desde temprano para acudir a dos escuelas la Himno nacional y luego Aquiles Serdán.
Diariamente recorre las colonias Modulo 2000, Constitución, Ferrocarril, pero los sábados y domingos se va a los campos de fútbol y softbol.
“La mujer puede hacer lo que quiera, cuando le echa ganas todo se puede, yo animo a las mujeres para que no dejen de luchar”, expresó mientras se retiraba en su motocicleta.