Circular a alta velocidad; virar sin direccionales; no hacer los altos reglamentarios son algunas de las múltiples infracciones en que incurren los operadores de los llamados transportes escolares.

No obstante estas diversas faltas, en el caso de Río Bravo, la Delegación del Transporte, no ha intervenido para frenar estas prácticas que ponen en riesgo a los alumnos, sobre todo a los de primaria y secundaria, que son los más vulnerables.

Una de estas unidades, fue captada en calle Cuauhtémoc con Rayón, fraccionamiento Río Bravo, la cual parada sobre el arroyo vehicular permitía el acceso y descenso de estudiantes, sin importar el riesgo que implica detener la marcha sobre arroyo vehicular, además de tener tras de sí, un semáforo con la luz en verde.

Mientras no haya quién ponga un alto a estas prácticas, ya sea por el Escuadrón Vial o la Delegación de Transporte, los alumnos estarán a expensas de sufrir un accidente, por el irresponsable proceder de estos operadores, algunos de ellos sindicalizados.

PELIGRO

No obstante estas diversas faltas, en el caso de Río Bravo, la Delegación del Transporte, no ha intervenido para frenar estas prácticas que ponen en riesgo a los menores.