Familiares de Jesús Felipe Serna Mosqueda, uno de los infortunados pescadores muertos tras volcarse la lancha en que andaban en el río Bravo, acudieron a la fiscalía séptima investigadora para exigir que agilicen la búsqueda del cuerpo y al mismo tiempo a reclamar las pertenencias.

La esposa de Jesús Felipe, dijo que éste cuando salió de su domicilio ayer por la mañana, llevaba en su cartera más de un mil dólares en efectivo que emplearía en la compra de algunas refacciones para la reparación de su vehículo.

Él debió haber ido a Hidalgo, Texas a comprar las refacciones, pero prefirió irse temprano al río a pescar, como diariamente lo hacía junto con su hermano Juan Manuel Rodríguez Mosqueda, cuyo cuerpo había sido rescatado horas después del accidente.

La angustiada mujer expresó textualmente: “Finalmente, no me interesa ni el dinero, ni la camioneta de mi esposo, lo que quiero es que me ayuden a localizar su cuerpo. Yo cambiaría todo lo material por saber que mi esposo aún esté con vida; lo material no me interesa tanto como saber de él”, expresó.

SUSPENDEN LA BÚSQUEDA

Por otra parte personal de Protección Civil y Bomberos, se vieron obligados a suspender la búsqueda del cuerpo, con la promesa de que la reanudarían este día, desde temprana hora. El comandante Marco Antonio Llanas Quintero, quien encabezaría la brigada de rescate, informó que por cuestiones de seguridad y ante la poca visibilidad se vieron precisados a abandonar la búsqueda. Pero en cuanto amanezca reanudaran los trabajos.