Monterrey, N.L.
Un joven fue hallado muerto por hipotermia, en una camioneta en la cual dormía, en San Nicolás, mientras que un bebé pereció asfixiado, al ser cobijado en exceso, en un domicilio de García, en un par de casos relacionados ayer con el frente frío.
El primero de estos fallecimientos se registró la tarde de ayer en la calle Rosal, de la Colonia Fomerrey 111, de San Nicolás, según informaron voceros policíacos.
Dijeron que vecinos del sector encontraron sin vida al joven, Pablo Hinojosa, a bordo de una camioneta que le servía de refugio, debido a que era adicto a las drogas y sus familiares lo habían corrido de su casa.
Añadieron que Hinojosa también presentaba golpes leves, ocasionados en una riña reciente.
Consideraron que su muerte ocurrió en el transcurso de la madrugada, cuando la temperatura bajó a un sólo dígito.
Pero fue hasta las 14:45 horas que los colonos se percataron de que no presentaba signos vitales.
Por otra parte, las autoridades confirmaron que la mañana del pasado viernes, el bebé, Alfredo Jared Dorantes, de 2 años, fue hallado sin vida por sus padres, quienes lo cobijaron en exceso, en una casa de García.
Aseguraron que la muerte, atribuible a una asfixia accidental, ocurrió en el domicilio situado en la calle Terra Azul, de la Colonia Cumbres Provenza.
Las autoridades mencionaron que los padres del menor trataron de proteger a su hijo de las bajas temperaturas, registradas en Nuevo León durante el fin de semana por el frente frío en la región, que se disipará hoy.
En tanto, los albergues municipales y estatales de la zona metropolitana permanecieron saturados viernes y sábado, debido a la gran cantidad de personas en situación de calle.
Asimismo, elementos policíacos y rescatistas repartieron bebidas y comidas calientes en diferentes puntos de la ciudad.