El amor de madre es una conexión muy especial que generalmente se da entre una mujer y su hijo biológico, pero no es necesario parir a un bebé (O empollar un huevo) para sentirlo, así lo demostró una mamá gallina que cuida fervientemente de sus patitos como si fueran propios.
La aguerrida y adorable gallina con el instinto de madre muy desarrollado adoptó a una pareja de patitos huérfanos, los polluelos son pequeños y parece que salieron hace poco del cascarón, por lo que necesitan muchos cuidados.
Atención que la gallina no dudó en llevar a cabo para velar por el bienestar de sus adorados “hijos”. “Madre es quien cría”, dice el dicho y esta gallina se tomó esa frase muy a pecho.