Atlanta, EU
Kyrie Irving se encargó de la situación como sólo él sabe hacerlo. Dribló y aceleró por el callejón y el perímetro. Anotó desde cualquier parte y se cercioró de que sus compañeros estuvieran involucrados en el partido durante toda la noche.
“Este deporte es hermoso cuando lo juegas bien”, comentó el armador, cuatro veces elegido para el Juego de Estrellas. “No todo lucirá bien en cada jugada, pero hay que tener la capacidad de realizar la siguiente. Yo entiendo eso mejor que la mayoría”.
Irving anotó 35 puntos y Al Horford coqueteó con el “triple doble” para que los Celtics de Boston superaran el lunes 110-107 a los Hawks de Atlanta, con lo que lograron su novena victoria en fila.
Un triple de Irving desde el costado derecho dio a los Celtics la ventaja cuando restaban 1:37 minutos. En un partido en que la delantera cambió de manos 25 veces, Boston no volvió a mirar atrás.
“Él es único. Tiene una percepción estupenda de cómo juegan los equipos rivales”, opinó Horford en referencia a Irving.
Horford totalizó 15 puntos, 10 rebotes y nueve asistencias, en su mejor partido contra los Hawks. El dominicano pasó sus primeras nueve temporadas en Atlanta y se marchó como agente libre antes de la campaña pasada.
En total, Horford había conseguido 20 puntos y 17 rebotes en tres partidos frente a los Hawks.
Jayson Tatum ayudó a la causa de los Celtics, con 21 puntos.
Dennis Schroder sumó 23 unidades por unos Hawks en reconstrucción, que cayeron a una foja de 2-9, una noche después de imponerse por dos puntos en su visita a Cleveland.
“Hubiera sido muy dulce ganar dos encuentros seguidos ante este tipo de equipos”, dijo Schroder. “Pero nos quedamos cortos”.
Boston mejoró a 9-2, el mejor récord en la NBA. Ostenta su racha más destacada en siete años.