Al menos dos hombres fueron abatidos durante la tarde de ayer en un enfrentamiento entre sujetos armados en un ejido del poniente de la ciudad, en el lugar las autoridades encontraron al menos más de un centenar de casquillos percutidos de grueso calibre.
Los hechos se registraron a eso de las 18:00 horas de ayer sobre la carretera Ribereña a la altura del kilometro 45 frente al ejido Estación Argüelles hasta donde arribaron autoridades federales y ministeriales quienes tomaron conocimiento.
Los dos hombres que fueron abatidos quedaron en calidad de desconocidos ya que no contaban con identificaciones entre sus pertenecías los cuales viajaban a bordo de una Chevrolet Tahoe, gris, el primero de ellos vestía playera negra, short camuflageado y tenis blancos mientras que el segundo traía pantalón de mezclilla, playera blanca con rayas negras y calzado café.
Versiones de testigos del enfrentamiento señalaron que las víctimas viajaban de oriente a poniente sobre la carretera Ribereña y al pasar por el lugar se enfrentaron con los tripulantes de dos camionetas que circulaban en sentido contrario entre las que destacaron una Chevrolet, negra, cerrada de donde les dispararon más de cien ocasiones.
Luego de intercambios de disparos cayeron abatidos los dos hombres los cuales intentaron huir del lugar quedando a unos cincuenta metros de la camioneta en la que viajaban.
Agentes Investigadores de la Fiscalía General número 3 en esta frontera, arribaron al lugar para tomar conocimiento e iniciar con las investigaciones además también arribaron Peritos Criminólogos quienes realizaron algunas Técnicas de Campo y tomaron placas fotográficas de la escena del crimen.
De el lugar los peritos encapsularon casquillos percutidos, algunas prendas tácticas, además de otras evidencias las cuales serán puestas a disposición de la fiscalía.
Personal del Servicio Médico Forense realizaron el levantamiento de los cuerpos para hacer el traslado a sus instalaciones donde les realizaron la necropsia de ley y donde permanecerán hasta que sus familiares acudan a reclamarlos.