Crecer bajo la sombra de Joan Sebastian y Maribel Guardia no ha sido fácil para Julián Figueroa.
Pero, poco a poco, con el apoyo de su madre y la meta de ser un intérprete reconocido, el joven ha ido encontrando quién es.
“Para Julián ha sido muy difícil tener a dos papás famosos, porque no es fácil crecer en medio de dos figuras y no tener una identidad. Ha sido un paquete pesado que ha cargado en sus espaldas y ha estado expuesto a la prensa desde chiquitito.
“Eso es difícil, le ha costado salir adelante, pero así le tocó vivir y nacer en medio de dos papás cirqueros y gitanos. Ahora tiene que abrir sus alas. Ya está (construyendo) esa identidad”, expresó Guardia en entrevista.
Sabiendo que su hijo debe forjar su propio camino en la música, la actriz ha intentado guiarlo con cariño y a través de su experiencia, pero sin sermonearlo.
“A los hijos se les habla más con el ejemplo que con las palabras, porque, a veces, les das consejos y dicen: ‘ay, qué pereza’.
“Observan cómo te has desenvuelto en la vida y cómo has salido adelante, y ese puede ser el mejor ejemplo”, consideró.
El apoyo y enseñanza de Maribel ya rindieron frutos: Julián está a punto de firmar su primer acuerdo con una discográfica.
“Está muy emocionado porque ya le mandaron el contrato de una compañía muy importante e internacional. Su sueño es ser cantante. Yo, como mamá, lo apoyo en todo lo que pueda: con amor y lo que necesite, porque todavía no gana dinero”.