CIUDAD DE MÉXICO.
El director de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, Alberto Bazbaz, informó que en 2013 y 2014, la UIF bloqueó fondos por un monto total aproximado a los dos mil millones de pesos, y que la PGR aseguró otra cantidad igual, proveniente de operaciones de lavado de dinero.
Reveló que de aproximadamente 500 personas y empresas, cuyos fondos fueron bloqueados, sólo seis acudieron ante la UIF a reclamar la liberación de los recursos. También dio a conocer que dicho organismo recibe 20 millones de reportes de operaciones inusuales al año, pero se trata de avisos, no de denuncias ni delitos.
Dijo que es prácticamente imposible tratar de determinar la actividad ilícita concreta de donde proviene el dinero “lavado”, y también ubicar a las principales cabezas o autores intelectuales de dichas operaciones, porque sus nombres no aparecen nunca en estados de cuenta ni escrituras de inmuebles.
Durante su participación en el primer Congreso de Prevención de Lavado de Dinero y Corrupción, precisó que en 99% de los casos investigados es materialmente imposible determinar el origen de los recursos ilícitos, y que 99.9% de las cuentas bancarias y propiedades de los cabecillas están registradas por prestanombres a los que de poco sirve meter a la cárcel.
Respecto de la imposibilidad de determinar el origen, comentó que no es de extrañar, porque ése es el objetivo del lavado de dinero, evitar que se conozca la actividad ilícita concreta de donde proviene el dinero lavado, tal como lo explicó la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en una resolución.
Sin embargo, destacó que la autoridad no necesita establecer el origen exacto de la actividad ilícita para combatir el lavado de dinero, pues le basta con tener indicios claros de que los recursos involucrados en alguna operación financiera no son claramente lícitos.
Explicó que el lavado de dinero es una actividad compleja, en la que se lavan recursos provenientes de actos de corrupción, de facturación apócrifa y defraudación fiscal, contrabando, secuestro, extorsión e incluso de proyectos empresariales,en los que participan con o sin conocimiento, empleados bancarios, comerciantes y empresarios.
Comentó que muchas personas simplemente se involucran sin saber en actividades financiadas con recursos económicos de procedencia ilícita, de modo que todos participan de una u otra manera, en mayor o menor medida, en el blanqueo de dinero que, incluso, financia proyectos de infraestructura o la operación de empresas y el pago a sus trabajadores, lo que al final del día causa un grave daño a la economía formal.
Durante su exposición, dijo que la reforma a la Ley de Extinción de Dominio o la Ley anticorrupción serán muy útiles a la sociedad en general, y a la autoridad en particular, para combatir de manera más eficaz el lavado de dinero.