Un caso de los muchos que han prevalecido de violencia familiar de género pero de en este caso de mujer a hombre, se escenificó en las afueras de conocida empresa maquiladora en la ciudad, en el que fue agredido y humillado minutos antes de entrar a laborar un humilde obrero.
La peculiar agresión en el que se resalta como es de que la liberación femenina y la igualdad de género han permitido a la mujer posicionarse no solamente como las jefas del hogar, sino también como quien lleva los pantalones, manda en el casa y hasta cuando van salen a pasear, en convivios, piñatas, bautizos, y fiestas en general.
Triste odisea le tocó vivir un día por la tarde a humilde obrero quien tras ser perseguido por la banqueta por quien al parecer es su pareja sentimental, lo acorraló de tal manera que no le dio margen a esquivar los golpes en pleno rostro y cuerpo, hasta el grado de tirarle en la banqueta una bolsa con alimentos que traía consigo.
El drama no terminó ahí sino que no contenta, lo siguió hasta la puerta de entrada de la empresa, en donde le acomodó otras cachetadas más acompañadas por una serie de amenazas e insultos.
Si bien la violencia de género es un problema histórico la agresión a los hombres se ha tomado como un problema normal para la sociedad, a pesar de que en los últimos años documentados desde el 2015 inclusive el índice de varones asesinados por mujeres va en aumento con un 41.5 por ciento contra un 56.8 por ciento en mujeres.
EXCEPCIÓN A LA REGLA
Triste odisea le tocó vivir un día por la tarde a humilde obrero quien tras ser perseguido por la banqueta por quien al parecer es su pareja sentimental, lo acorraló de tal manera que no le dio margen a esquivar los golpes en pleno rostro y cuerpo, hasta el grado de tirarle en la banqueta una bolsa con alimentos que traía consigo.