Si creciste en los años 90, seguramente recordaras esos años como los mejores. No teníamos internet, ni aparatos tecnológicos con los cuales divertirnos. Todo era pasar la tarde junto a tus vecinas o amigas del colegio disfrutando de estos simples pero increíbles juguetes que nos hicieron felices por tantos años.
MALL MADNESS
Este mini shopping era lo mejor porque ¡incluía tarjetas de crédito! Y nos hacía sentir como adultas.
Aquí nacieron nuestra adicción a las compras.
¿ADIVINA QUIÉN?
De seguro pasaste tardes enteras jugando una y otra vez este juego con tu mejor amigo del colegio o con tu vecino. Realmente era el juego de mesa mas emocionante del planeta. Un tiempo después de comprarlo ya te sabias a todos los personajes de memoria, pero no importaba jugarlo siempre era demasiado divertido.
SKY DANCERS
odas pretendíamos que estas hadas eran reales, porque podían volar con ayuda de una cuerda. Y eso era lo mejor de estas muñecas que además tenían una serie animada del mismo nombre. Eso si, lo fascinante que podía llegar a ser que volaran también se podía convertir en letales armas.
POCKET LOCKER
Era la manera más segura de mantener alejados a tus padres y hermanos de tus pensamientos más íntimos. Esta agenda electrónica era demasiado entretenida, a pesar de que quizás usábamos la mitad de sus funciones.
MY SIZE BARBIE
Lo mejor de esta muñeca es que era de tamaño real, por lo que podíamos compartir divertidas aventuras con ella. A veces incluso podías compartir la ropa y confeccionar hermosas piezas para ella también.
TAMAGOTCHI
Una de las justificaciones para adquirir este costoso juguete japonés era que te enseñaría sobre responsabilidad. Pero la verdad es que solo lo pasaste muy bien y probablemente mataste a cientos de tamagotchis.
BARBIE POWER WHEELS
Al andar arriba de este auto todas nos sentíamos las reinas del mundo. El estatus que te entregaba recorrer tu vecindario en tu “propio automóvil” era lo mejor del mundo.
PREGÚNTALE A ZANDAR
Qué inocentes éramos cuando niños. Nos encantaba este juego porque la curiosidad de saber si el niño que te gustaba estaba enamorado de ti era más grande que todo. Y en verdad creíamos que las respuestas eran reales.
PERFECTION
Todos cuando niños teníamos la imperiosa necesidad de ordenar las piezas de este juego antes de que explotaran en nuestra cara. Esa adrenalina era increíble. Aquí jugabas con todos tus amigos.