La Policía Estatal retomó el “Operativo Omega” que se encarga de detectar unidades que no cuentan con placas o que portan láminas de los Estados Unidos.
En diversos puntos de la ciudad se instalaron retenes que tomaron por sorpresa a los conductores ya que desde hace tiempo, no se realizaban estas revisiones.
Uno de estos operativos, se instaló en la calle Bravo, justo al salir del paso a desnivel por lo que en un inicio, llamó la atención las largas filas de autos que se formaron en esta arteria.
Al salir del paso a desnivel, se encontraban elementos de la Policía Estatales quienes solicitaban a los conductores la documentación de sus unidades.
Para ello, delimitaron tres carriles con conos en color naranja a fin de que los conductores esperaran en algún carril para ser revisados.
De esta forma, las unidades que contaban con placas americanas eran detenidas por los elementos estatales, así como los autos que no contaban con las mismas.
Aquellas unidades que portaban placas, se les permitió salir de los carriles para continuar su camino.