Una niña de escasos 10 años que durante casi un año soportó los abusos sexuales de su padrastro, decidió romper su silencio y contó a sus vecinos lo que estaba padeciendo.
Fueron los vecinos los que la apoyaron y la llevaron a las Unidades Generales de Investigación para denunciar los hechos y buscar la forma de que el grave delito sea sancionado conforme al nuevo sistema de justicia penal.
La menor relató a sus vecinos que su padrastro la tenía amenazada desde la primera ocasión que había abusado de ella, pero calló por temor a que le causara mayor daño.
Sin embargo, ayer cuando se repitió la vil acción, decidió contarle a sus vecinos y fueron ellos, los que conmovidos la llevaron a denunciar, en ausencia de la madre que en esos momentos se encontraba trabajando.
La progenitora de la niña salía a trabajar diariamente y la dejaba al cuidado de su pareja, ignorando lo que estaba sucediendo en su domicilio situado en la colonia Jarachina.