Haciendo a un lado las cifras de los empleos perdidos por la crisis económica que ha agravado en las últimas semanas, el drama que viven muchos desempleados y subempleados, los lleva a soportar intensas horas en el sol, para hacer filas en los pocos proyectos comerciales o de giros diversos que están por abrir en la localidad.
En recorrido por diversos puntos de la ciudad, se puede apreciar las largas filas de personas que buscan un empleo y que no les importa estar horas de pie bajo el intenso sol de la canícula, para conseguir una entrevista de trabajo, o simplemente dejar una solicitud y su currículum.
“Yo ya no alcancé a dejar mi solicitud en la tienda que van a reabrir por mi casa, llegué un poco tarde porque había ido a otros lugares a buscar chamba, hasta que me decidí a hacer fila, pues no me había animado por las filotas que había, pero no alcancé, voy a tener que seguirle buscando, pero sé que en difícil que halle aquí en Río Bravo, pero si voy a Reynosa, no todas las maquilas ofrecen transporte, y con los del pasaje, se me va buena parte del sueldo”, dijo Fernando Navarro, residente de colonia Paraíso.
El sector de los subempleados que ejercen actividades poco remuneradas o informales, también se ve afectado, al grado que muchas servicios como cortes de cabello, lavado de autos que son hechos por cuenta propia de personas que no tienen establecimientos formales o que laboran desde sus casas o en la vía pública.
Cortes de cabello a 25 pesos, lavadas de coche a 30, limpieza de solares por 50 pesos, son producto de la escasez de empleos y circulante en la comunidad, situación que no se prevé, mejore ni en el corto, ni en el mediano plazo.