Jerusalén.

El cese de actividades militares temporal que pactaron el viernes Rusia y Estados Unidos en dos frentes de Siria está siendo respetado este sábado, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. El llamado “régimen de silencio”, que implica un cese de todas las actividades militares, debe ser aplicado hasta la próxima medianoche en las montañas de Latakia, en la franja costera mediterránea, y en la zona rebelde de Guta Oriental, en las afueras de Damasco, donde está previsto que se mantenga hasta la medianoche del lunes.

Los bombardeos prosiguen mientras tanto sobre Alepo, la gran urbe del norte del país castigada por la reciente escalada de combates, que quedó finalmente excluida del pacto entre Washington y Moscú para intentar salvar el cese de hostilidades que rige desde hace dos meses.

Cerca de 250 personas han muerto en los ataques contra Alepo en ambas zonas de la ciudad durante los últimos nueve días. El Observatorio de Derechos Humanos contabilizó este sábado más de 30 bombardeos aéreos sobre los distritos que se hallan bajo control de las fuerzas de la oposición, donde viven unas 200.000 personas, sin precisar si se trataba de aviones del régimen sirio o de sus aliados rusos, que se han cobrado al menos cinco vidas.

En otro frente abierto, un atentado suicida ha causado también este sábado la muerte de al menos seis miembros de las fuerzas rebeldes kurdas en un puesto de control situado cerca de Qamishli, al noroeste de Siria. La milicia de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo) controlan gran parte del zona fronteriza con Turquía, donde se enfrentan al Estado Islámico con el apoyo de Estados Unidos.