Ciudad de México
El Gran Pez atrapó a un pez gordo para su banquillo.
Los Dorados de Culiacán, del Ascenso MX, anunciaron ayer la contratación de Diego Armando Maradona como director técnico, después de despedir a Francisco Ramírez.
“¡Bienvenido Diego al Gran Pez!”, celebró el equipo en su página de Twitter, sin dar a conocer los términos del acuerdo contractual al que llegó con el considerado por muchos, mejor jugador de futbol de la historia.
Grupo Caliente es propietario del 60 por ciento de esta franquicia desde 2013.
Según medios argentinos, el “Diez” viajaría entre sábado y domingo a México para asumir el cargo.
El “Pelusa”, tan célebre por sus prodigiosas actuaciones como futbolista en México 1986 como por su polémica personalidad y sus excesos, intentará resucitar su carrera como entrenador en la tierra del Chapo del Guzmán.
REPITE DORADOS
GOLPE MEDIÁTICO
Con el fichaje de Diego Armando Maradona como su entrenador, Dorados evocó al golpe mediático que dio en diciembre del 2005 en el intento por salvarse del descenso.
Entonces, el cuadro de Sinaloa estaba en la Primera División mexicana con el problema del cociente hasta el cuello y requería una luz de esperanza. La directiva pensó, asesorándose con la empresa del argentino Jorge Valdano, que los españoles Josep Guardiola en el campo y Juan Manuel Lillo en la dirección técnica serían la solución.
Guardiola ya no era el mismo de sus años como jugador del Barcelona y Lillo fue, como muchos de los “intelectuales” inmersos en el futbol, más teórico que práctico. Dorados no frenó la hecatombe y en mayo del 2006 la franquicia ya estaba descendida.
Pero la euforia de la afición por Guardiola puso a Culiacán en el aparador, ante los ojos del mundo.
Justo en ese torneo, Clausura 2006, también contaba el equipo sinaloense con el uruguayo Sebastián Abreu en sus filas. Goleador nato y ya famoso, que cuatro años después conquistaba con Uruguay el cuarto lugar en el Mundial de Sudáfrica.
Con esa fórmula de hacer ruido, el club sinaloense contrató al argentino Diego Latorre (2003), Jared Borgetti (2004), el brasileño Pedro Iarley (2004) y Cuauhtémoc Blanco (2012).
Ahora la “bomba” la tronó en la estrategia, con la apuesta en Maradona y todo el remolino que su llegada seguramente causará en la sociedad sinaloense, en espera de que en esta ocasión y en lo deportivo los resultados no se queden a un lado.