Mientras que para algunos la lluvia que se registró ayer en Reynosa fue motivo de diversión, para otros, representó peligro.
Sobre todo para niños y jóvenes, los ríos que se formaron en algunas calles, sirvieron como balnearios para jugar y pasar un momento de diversión.
Por ello, salieron a las calles a disfrutar de un refrescante chapuzón, sin medir el peligro que esto representa pues algunas alcantarillas se encuentran abiertas.
En algunos otros casos, el agua arrastró madera o material que pudiera provocarles alguna cortadura, sin embargo, igual disfrutaron de estas corrientes que se formaron en la ciudad.
Para otros, el nivel del agua les impidió trasladarse de forma segura en el caso de aquellos que utilizaban bicicletas o motocicletas.
Para quienes se desplazaban a pie, las corrientes de agua fueron un obstáculo para seguir su camino, aunque hubo quien, se aventuró en el agua para poder llegar a su destino.
Cabe destacar que aún y cuando elementos de tránsito se apostaron en los pasos a desnivel para impedir el acceso de conductores, algunos desatendieron las indicaciones y se quedaron en estos cruces anegados.