La camioneta que le habían robado a José Antonio Flores, el pasado 4 de octubre por la mañana frente a una taquería en la colonia Jacinto López, apareció chocada en el viaducto Reynosa.
La esposa del denunciante, Merari Bravata Jiménez, de 26 años, se presentó a reclamarla ayer en la agencia séptima del Ministerio Público, llevando consigo una copia del parte de accidente que se formuló en el Departamento de Peritajes de Tránsito y Vialidad, donde se hace constar que la camioneta Ford F-150, modelo 1997 había chocado contra un objeto fijo en el viaducto Reynosa y que se encontraba abandonada.
Supuestamente la unidad la chocaron los ladrones y la dejaron abandonada.
Pero las autoridades se mostraban un tanto escépticas, puesto que en Tránsito local se informa a través del parte, que la camioneta se encontró abandonada el 4 de octubre a la 1:40 horas y Flores se presentó por la tarde del domingo poco después de las 14:30 horas.
Suponían que los mismos propietarios de la unidad estuvieran involucrados en el accidente y para desligarse de responsabilidad hubieran denunciado el robo de la camioneta.