Bruselas.
Unos 75 mil niños en el noreste de Nigeria podrían morir el próximo año por la hambruna generada por el grupo islamista Boko Haram, advirtió el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
La crisis humanitaria en Nigeria es una de las más graves del mundo por su intensidad y el elevado número de niños en riesgo de muerte, denunciaron expertos de la Unicef, de acuerdo con el sitio de noticias Salon.com
La asistencia humanitaria está en la zona, pero Naciones Unidas no pueden recaudar ni una cuarta parte del dinero que necesita para trabajar de manera efectiva.
En las zonas que controla la organización rebelde hay problemas de acceso a la comida y la salud. Se estima que unas 800 mil personas viven en aldeas en ruinas y 15 campos de refugiados en el estado de Borno.
En esa región existen casi cuatro millones de personas en situación de inseguridad alimentaria. Según Unicef hay unos 200 mil niños desnutridos.
Una ofensiva del ejército nigeriano en los meses recientes obligó a los militantes de Boko Haram a replegarse al norte, donde se estima que dos millones de personas siguen fuera del alcance de las organizaciones de ayuda.
El responsable de nutrición de la Unicef en Nigeria, Arjan de Wagt, señaló hace dos semanas en Ginebra que "al norte de Borno todavía hay muchos distritos que son completamente inaccesibles para nosotros".
El representante del organismo de protección infantil confirmó que las nuevas evaluaciones han revelado que al menos 244 mil niños están en condición de desnutrición grave en el estado de Borno.
Para superar esa situación, los menores necesitan ser nutridos en primera instancia con alimentos terapéuticos.
En los tres estados del norte de Nigeria, la ONU calcula que 4.4 millones de personas necesitan asistencia humanitaria urgente y que unas 55 mil personas adicionales se encuentran en "condiciones similares a la hambruna", afirmó el representante de Unicef.
"El nivel de sufrimiento y desnutrición en esos lugares es extremadamente alto, con un 12 por ciento de desnutrición severa, que es algo que normalmente no se ve y subraya la gravedad de lo que está sucediendo allí", declaró De Wagt.