A pesar de ser un menor de edad, “Cirilo” es ya todo un psicópata sexual, pues en menos de 15 días dio muerte a dos personas de su mismo sexo, con quienes primero sostenía relaciones y luego les quitaba la vida y les prendía fuego a los cadáveres y a las camionetas que éstos conducían.
Era tanta su sangre fría que paseaba con los cadáveres buscando un lugar “seguro” para quemarlos, pero antes de ellos, acudía a los centros de conveniencia llamados Oxxo o Seven y ahí con el mismo dinero de las víctimas compraba un galón con agua purificada, la cual tiraba y llenaba de gasolina los recipientes y rociaba los cuerpos y les prendía fuego.
La primera de sus víctimas fue un profesor jubilado, quien se llamó en vida Erasto Castillo Bautista, el cual contaba con 73 años de edad y tenía su domicilio en el fraccionamiento Paseo del Magisterio.
También dio muerte al modisto Ricardo Rodríguez Tavera, de 43 años de edad, quien residía en las calles González, Uno y Dos, de la zona centro. (Matamoros, Tam.)