Antes de que concluya este año, las primarias, secundarias y preparatorias de la ciudad deberán contar sin excepción con infraestructura que permita un libre tránsito a las personas con discapacidad.
Una revisión exhaustiva en los más de 800 planteles de Reynosa evidenció que un gran porcentaje carece de rampas, pasamanos, baños especiales, cajones de estacionamiento, entre otros.
Durante este mes en el que se fomenta la inclusión educativa, se buscará concientizar a los directivos, Georgina Aparicio Hernández, Directora del Centro Regional de Desarrollo Educativo indicó.
“Tenemos que apostar por un modelo de educación en el que todos tengan oportunidades, es un derecho que todos puedan acceder a las clases sin tener que preocuparse por cómo entrar, dónde dejar la silla o si hay o no rampas, lo mismo al acudir al baño, necesitamos igualdad”.
La matricula académica actualmente está conformada por más de 130 mil alumnos de educación básica, el 15 por ciento presenta algún problema de movilidad, vista, oído o habla, por lo que es importante trabajar también en un programa de enseñanza incluyente.
“Hay profesores que han aprendido el lenguaje de señas, hay libros en sistema braille, hay alternativas para este sector de la población, queremos que no se desanimen que antes de aplicar alguna escuela especial consideren aquella que está más cercana a su domicilio”.
Se contempla contratar a más personal capacitado en el rubro, que incluso pueda brindar un acompañamiento a los estudiantes.
Los menores con alguna discapacidad que deseen inscribirse en un plantel común deben atravesar primero por un estudio para determinar si el centro de su elección es el adecuado.
UNA LUCHA CONSTANTE
El plan de desarrollo de este año contempla la mejora de las condiciones de calles, avenidas y banquetas por las que transitan las personas con discapacidad.
El regidor Marco Antonio Gallegos Galván, quien utiliza silla de ruedas por un problema de movilidad informó que de octubre a la fecha, la Comisión de Discapacidad ha recibido una queja por la invasión de espacios.
“Hay muchas rampas en la zona centro por ejemplo pero que no funcionan, al contrario estorban, entonces también hay que crear un manual donde se indique como construirlas de forma correcta“.