Un clima de incertidumbre es el que se avizora para el 2019 en el país porque no queda muy clara la política económica y de trabajo que instrumentará el nuevo gobierno federal.
En materia de empleos, se ignora cuántos más podrían generarse el año entrante y si serán menos o más que en el 2018 y anteriores, dijo Salvador Portillo Martínez, coordinador de la Rama de la Construcción en la Federación de Trabajadores de Reynosa.
En cuanto a aumentar al doble el salario mínimo, en ese tenor no aplica en la frontera norte del país porque aquí de hecho en todas las empresas se paga arriba del oficialmente establecido. Un ejemplo lo constituyen las maquiladoras.
A unos días de iniciar el año próximo, se palpa entre la gente un ambiente de inquietud por los anuncios que podría hacer el nuevo gobierno, señaló el dirigente.
Ojalá y sean más las medidas de beneficio que las que traigan consigo una afectación como lo representarían los que acarrearían los recortes presupuestales de los que ya se está hablando como parte de la política de austeridad anunciada por el mismo gobierno que recién entró en vigor.