Río Bravo, Tam.
Producto del sedimento que se registró en el 2015 del agua que se abastece al canal Anzaldúas lo que originó que se presentara una contingencia, la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa), mantiene acciones preventivas de monitoreo y limpieza, con la finalidad de dar seguimiento a la calidad del agua que se suministra a los miles de usuarios, reportando ayer por la tarde controlada la situación.
En un recuento sobre los hechos que se empezaron a presentar desde el fin de semana, detalla a reporteros de EL MAÑANA Pedro Ignacio Vázquez Lozada, que conforme continúan aplicando las medidas preventivas necesarias se va disolviendo la contingencia aunque no deja de estar latente, mientras que no se confirme el fluido necesario de remanentes de agua que permita eliminar en su totalidad la sedimentación.
“Mantenemos las acciones preventivas en forma permanente en las 110 válvulas con hasta 20 cuadrillas, efectuando tareas de limpieza y monitoreando la calidad del agua con el apoyo de un laboratorio externo certificado”.
Explicó que al no haber movimiento de desfogue de agua en el canal es el hecho de que se presenten este tipo de situaciones, en el que las condiciones que recibe el organismo el agua no son las óptimas, que se agrava si se toma en cuenta que la planta potabilizadora está diseñada para agua corriente.
“Estamos encontrando en respuesta un gran avance en cuanto a la calidad del agua que ofrecemos a la comunidad, tenemos controlada la situación con las acciones que hemos implementado, razón por la que ante algunos imprevistos pedimos disculpas a los usuarios, pero primero está la salud de toda la población”.