Una joven mujer que recientemente había sido ocupada como obrera de una maquiladora, murió ayer por la madrugada en el Hospital General, como consecuencias del envenenamiento que ella misma se provocó al ingerir raticida, en un acto suicida.

Mayra Elizabeth Valle Alvarado, de 34 años, quien tenía su domicilio en calle Domínguez 412 de la colonia Américo Villarreal había ingresado al Hospital General el pasado 28 de septiembre, presentando un cuadro severo de intoxicación.

Los médicos intentaron desintoxicarla, pero los daños que causó la substancia utilizada para matar ratas, fueron de efectos irreversibles, por lo que murió 6 días después. Mayra, dejó en la orfandad a 3 niños, que procreó con su primer concubino, el cual desapareció de su vida hace algún tiempo. En la actualidad vivía con otro hombre, según dijo su padre Gregorio Valle Aguirre, de 57 años, pero se desconocía si tenía problemas con él.

Lo que sí le constaba al progenitor de la joven suicida, es que sufría con mucha frecuencia de crisis depresivas. Evidentemente, en una de esas crisis fue cuando tomó la fatal determinación e ingirió el veneno para ratas.

RECLAMAN SU CUERPO

Gregorio Valle, se presentó ayer por la tarde ante el fiscal Miguel Ángel Ríos Sanjuán a solicitar la entrega del cuerpo de su hija, para darle cristiana sepultura.