Apenas la semana pasada fue uno de los tres ganadores del premio principal del Powerball (1,600 millones de dólares la bolsa), y el fin de semana fue encontrado muerto por una sobredosis.

El ticket de California fue adquirido en la comunidad de Chino Hills, en una tienda 7-Eleven. Poco tiempo después se conoció la identidad de la persona que había adquirido el ticket en Chino Hills: Un hombre de 32 años de edad, llamado James Hugston.

Hugston recibió 327 millones de dólares como premio por haber pegado los números ganadores y para celebrar su primera compra fue una casa valorada en varios miles de dólares en la localidad.

Rick Kingston, un amigo cercano a Hugston aseguró que el hombre había tratado de mantener su identidad en secreto y que lo estaba haciendo muy bien al mudarse de su apartamento de 2 habitaciones donde vivía con su novia, con quien rompió una vez se enteró de que era el ganador.

En la casa del nuevo multi-millonario James Hugston fue encontrado muerto debido a una sobredosis de una sustancia no conocida por su amigo Kingston. En las declaraciones el hombre dijo: “¡James se volvió loco rápido! Primero se compró esa casa enorme y luego invitó a más de 10 mujeres de backpage, una página de internet”.

No se sabe aún qué sucederá con el dinero restante de la fortuna recién adquirida de Hugston, ya que el único familiar vivo del hombre es su madre Melissa Hugston, una mujer de 60 años que aún no ha realizado declaraciones sobre la trágica situación.